El regreso

Soy un fracaso, no puedo ni siquiera escribir seguido un par de estupideces, un año sin nada, cero, triste y mediocre, pero he vuelto, probablemente por poco tiempo, no tengo ningún talento relacionado con la constancia, simplemente soy perezosa no sé de que escribir y soy muy complicada y no quiero escribir por escribir (como lo estoy haciendo ahora) pero quiero tener hábitos, y que mejor que escribir, al menos una vez al mes o probablemente una vez al año, pero bueno.

Hay tantos temas importantes de que hablar, las elecciones (Frei v/s Piñera), el terremoto en Haiti, lo cual es terrible, y muchas cosas más, pero no sé, no tengo inspiración ni ganas de investigar y opinar sobre algo con un poco de criterio, así que estoy escribiendo inercialmente, estoy dejando que mis dedos toquen las teclas sin sentido alguno y tengo suerte de que broten palabras existentes.

Hoy encontré mi blog, entre los cajones de mi facebook, buscando unas fotos de una amiga que hace tiempo que no veía y hoy me hablo en messenger, una sorpresa, una linda y rara sorpresa, y por eso escribo por que tengo blog, esta botado y quiero tener hábitos, como hoy no tengo tema ya me estoy dando vueltas en mi eje, como los leones en esas jaulas pequeñitas de los zoológicos de provincia, ya no escribo más, es tarde y mi madre quiere jugar un rato y leer el Mercurio, aunque en realidad va a leer la prensa rosa de LUN pero como es inteligente o pretende serlo dice que lee el Mercurio pero bueno cosa de ella.